Se disputó una nueva jornada del FIBA AmeriCup Qualifiers, en la que los equipos buscan asegurar su clasificación al torneo continental, programado del 23 al 31 de agosto de 2025 en Managua, Nicaragua. Este certamen también será un trampolín para las eliminatorias rumbo al Mundial de Baloncesto de 2027, aumentando la relevancia de cada partido.
Colombia llegaba a esta segunda ventana del Grupo A con un balance de una victoria y una derrota frente a Venezuela en febrero pasado. En esta ocasión, el reto era Chile, en un partido en Valdivia. Conocido como el “grupo de la muerte”, el Grupo A mostraba un empate cuádruple en puntos tras los primeros partidos, subrayando la competitividad de los equipos.
Para estos encuentros, Colombia contó con 10 de los 12 jugadores que participaron en la primera ventana. Sin embargo, Brian Angola, considerado el jugador diferencial de la selección, sufrió una molestia en el abductor, siendo una baja significativa para el equipo. A pesar de esta ausencia, el equipo presentó a cinco jugadores provenientes de ligas internacionales, lo que reforzaba su capacidad para competir al más alto nivel.
Este partido también marcó el debut de Tomás Díaz como entrenador principal de la Selección Colombia. Díaz, múltiple campeón de la Liga Profesional de Baloncesto Colombiano, asumió el rol tras ser asistente técnico de Guillermo Moreno durante tres años. El duelo contra Chile representaba una oportunidad para demostrar el potencial del equipo bajo su liderazgo y comenzar con el pie derecho en esta nueva etapa.
El encuentro comenzó con un primer cuarto lleno de luces y sombras para Colombia. Juan Tello abrió el marcador con buenos movimientos en la pintura, pero rápidamente se metió en problemas de faltas que lo enviaron al banco. Chile aprovechó esta ausencia, especialmente en el perímetro, mientras Colombia mantenía una sólida defensa interior. Ofensivamente, el equipo cafetero mostró versatilidad con el uso del pick and roll para abrir tiros, complementado por cortes efectivos hacia la canasta. Sin embargo, el cuarto terminó con ventaja para Chile, 21-20.
El segundo cuarto mostró un cambio de ritmo. Aunque ambos equipos cometieron errores en ataque, Colombia aprovechó su energía defensiva para robar balones y salir rápido al contragolpe. Hansel Atencia lideró con 13 puntos y un impresionante 3/4 en triples. Además, la defensa colombiana logró limitar a Chile a solo seis puntos en la pintura durante la primera mitad, cerrando el marcador 42-32 a favor de los cafeteros al descanso.
La segunda mitad comenzó con Chile decidido a remontar. El tercer cuarto fue especialmente complicado para Colombia, con los chilenos presionando intensamente a los armadores y ejecutando un excelente movimiento de balón. En un momento, Chile llegó a estar ocho puntos arriba, pero Colombia recuperó el ritmo hacia el final del cuarto. Una espectacular canasta desde mitad de cancha de Tonny Trocha sobre la bocina devolvió la ventaja a Colombia, que cerró el periodo 54-53.
El último cuarto fue un intercambio constante de golpes. Las defensas de ambos equipos se mantuvieron sólidas, pero Colombia mostró mayor concentración en los momentos clave. Un robo crucial de Romario Roque, seguido de una asistencia para que Juan Tello anotara en contragolpe, selló la ventaja final de seis puntos a favor del equipo cafetero.
Colombia finalizó con un 44.4% de efectividad en tiros de campo y 41.1% desde el triple, destacándose el desempeño de Michael Wright con 25 puntos, 5 rebotes y 2 robos. Hansel Atencia aportó 18 puntos, 3 rebotes y 4 asistencias, mientras que Romario Roque sumó 10 puntos, 3 rebotes y 3 asistencias.
Con esta victoria, Tomás Díaz inicia con un buen sabor de boca su ciclo como entrenador de la Selección Colombia, que ahora se dirige a Mar del Plata para enfrentar a Argentina. Este será un reto mayor, pero el equipo cafetero ha demostrado que puede competir al más alto nivel en esta fase clasificatoria.