En medio del calor de Bangkok y frente a una competencia que reunió a 178 atletas de 44 países, la bandera tricolor se alzó entre los mejores del planeta. La Selección Colombia de Jiu-Jitsu Masters firmó una actuación perfecta: cuatro atletas, cuatro medallas, una efectividad que habla de técnica, disciplina y orgullo nacional.
El rugido colombiano comenzó en la categoría Master 4 Fighting +94 kg, donde Hermann Giovanni Enríquez Barba impuso su experiencia y poderío para quedarse con la medalla de oro, superando a representantes de Alemania y Reino Unido. Su triunfo fue el primer grito de gloria para la Federación Colombiana de Jiu-Jitsu en tierras tailandesas.
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Poco después, la fuerza femenina también dijo presente. Alejandra María Lugo Arciniegas brilló en la división Master 2 Fighting +70 kg, donde demostró temple y estrategia para llevarse el oro frente a su rival de Bangladesh. Su victoria consolidó el dominio colombiano en una jornada dorada.
La cosecha continuó con el plata de Miguel Antonio Salgado Rubio, quien se quedó con el segundo lugar en la categoría Master 4 -62 kg, solo por detrás del mongol Lkhantsoo Bold. Su desempeño técnico y resistencia lo convirtieron en uno de los protagonistas del torneo.
El cierre fue para Johan Byron Rincón, quien obtuvo la medalla de bronce en la exigente división Master 1 -62 kg, completando así una presentación impecable para la delegación nacional.
En un campeonato donde países potentes como Mongolia, Alemania o Filipinas dominaron el medallero, Colombia se ubicó en el noveno puesto general, un logro enorme considerando el tamaño de su equipo: solo cuatro atletas, pero todos regresando con una presea.
Entre llaves, agarres y victorias memorables, la selección demostró que el jiu-jitsu colombiano sigue creciendo, conquistando escenarios internacionales con la misma pasión con la que comenzó: paso a paso, combate a combate, medalla a medalla.
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