El Rally Dakar ha alcanzado el desierto más imponente del planeta: el Empty Quarter, una vasta extensión de arena que cubre más de 650,000 km² en la península arábiga. Este escenario, cargado de mitos y leyendas, se convierte en el protagonista de las etapas finales de la edición 47 del rally más extremo del mundo.
Con la meta final fijada para el próximo 17 de enero, los competidores enfrentaron en la décima etapa un recorrido desafiante entre Haradh y Shubaytah, compuesto por 640 kilómetros, de los cuales 120 fueron cronometrados. El trayecto incluyó dunas de hasta 250 metros de altura, donde las estrategias tomaron el mando. Los favoritos prefirieron conservar energía para la decisiva undécima etapa.
Desde las alturas, el Empty Quarter se presenta como un océano interminable de arena teñida de naranja por el sol, un territorio inhóspito que ha inspirado historias como la de “La Atlántida de las Arenas”. Pero en este desierto también se escribe la historia moderna del Dakar, con pilotos que desafían los límites del cuerpo y la máquina.
El motociclista colombiano Francisco Álvarez, a bordo de su Husqvarna, tuvo una destacada actuación en la décima etapa. Finalizó en la posición 36 de la categoría Rally2, registrando un tiempo de 2H 35’15”, que lo mantiene en el puesto 40 de la clasificación general.
Tras cruzar la meta, Álvarez comentó:
“Me divertí mucho, solo tuve un par de caídas, pero nada grave, apenas recostadas en la moto. Fue una buena carrera hoy. Ya nos falta muy poco para acabar. Tenemos que mantener las ruedas girando.”
En la categoría Challenger (T3.1), el piloto colombiano Javier Vélez y su navegante argentino Gastón Matarucco siguen demostrando su talento. A pesar de saber que la ansiada medalla quedó fuera de alcance, el dúo ha enfrentado cada jornada con profesionalismo y determinación.
En esta décima etapa, Vélez alcanzó la posición 18, superando enormes dunas y condiciones extremas. Sobre la jornada, Matarucco expresó:
“Hoy fue un día largo, con mucho frío. Salimos muy temprano. Contento de no haber tenido ningún problema. Pero no hay que bajar la guardia: el Dakar, hasta los últimos kilómetros, no te perdona.”
El Rally Dakar 2025 se prepara para su penúltima etapa, un bucle en Shubaytah que promete ser crucial. Con un recorrido de 508 kilómetros (232 de enlace y 276 de especial), los competidores enfrentarán un escenario implacable, completamente rodeados de dunas.
En esta etapa, motos y coches seguirán rutas separadas, aumentando la dificultad al no contar con referencias previas en el terreno. Con 300 kilómetros de dunas por delante, cualquier error, ya sea una avería o un atascamiento, puede cambiar el destino de la carrera.
El Dakar 2025 está a punto de definir a su campeón en uno de los entornos más extremos y míticos del planeta. El Empty Quarter sigue poniendo a prueba la habilidad, resistencia y espíritu de los pilotos, que luchan no solo contra el cronómetro, sino también contra las arenas eternas de este desierto inhóspito.
