La piscina del Complejo Acuático de Cochabamba volvió a sentir la vibra de un gran campeonato. Entre banderas, voces y cronómetros afilados, Colombia convirtió la XLIII Copa Pacífico y la XIX Copa Julio Maglione en un escenario de poderío juvenil. Fueron cuatro días de ritmo frenético, finales vibrantes y un equipo que nunca dejó de empujar hasta convertir el agua boliviana en territorio tricolor.
Un segundo día que encendió la llama

Desde temprano, la Copa Pacífico comenzó a mostrar lo que sería una tendencia inevitable: Colombia dominando prueba tras prueba. Samuel Reyes abrió con una plata en los 200 libre (2:01.62), y minutos después, Daniel Díaz Cervantes dio el primer gran golpe del día con el oro en los 200 libre 16-18 (1:57.90).
Llegaron entonces los veloces 100 libre femeninos: doble oro. Primero María Gabriela Becerra (1:00.79) en Juvenil A, seguida de Carolina Rojas (59.46) en Juvenil B. En mariposa, David Uribe y Samuel Muñoz sumaron plata y bronce en los 200, reforzando el buen comienzo de la tarde.
La jornada avanzó con más podios: platas para Isabella López y Isabella Moreno en pecho, un poderoso oro de Matías Ramírez en los 400 combinados (4:53.54) y un 1-2 contundente de Sarah Sofía Triana y Erika Naranjo en los 800 libre. Para cerrar, llegaron los relevos: oro en el 4×100 combinado femenino 14-15 y plata en el 16-18, sellando una actuación redonda para el equipo.
Maglione: las noches también tuvieron dueño

En la jornada vespertina, donde solo llegan los mejores tiempos del día, el tricolor dio un golpe de autoridad. Daniel Díaz abrió la final de los 200 libre con oro (1:59.00) y Samuel Reyes agregó un bronce apretado (2:00.01). En los 100 libre femeninos, Rojas fue oro (58.89) y Becerra plata (59.66), un reflejo de la sincronía que marcó a la delegación durante todo el torneo.
La noche siguió con mariposa, pecho y combinados: David Uribe y Samuel Muñoz repitieron podio con plata y bronce, mientras en los 400 combinados Matías Ramírez sacó una actuación magistral (4:53.54), seguido por Jerónimo Guerrero con la plata. El cierre fue electrizante: triple podio colombiano en los 800 libre femeninos, con Sarah Sofía Triana liderando la barrida dorada.
Viernes: la ola colombiana no se detuvo

El viernes la Copa Pacífico volvió a amanecer tricolor. El relevo mixto 4×100 combinado fue oro desde el primer toque (4:14.99), y el festival continuó con oros de Carolina Rojas (50 libre), Mateo Ramírez (200 espalda 14-15), Tomás Escobar Bañol (200 espalda 16-18) y Erika Naranjo en los 1500 libre.
La rivalidad interna más emocionante vino con los 100 mariposa: Samuel Muñoz ganó el oro (57.20) y David Uribe se quedó con la plata (57.82). Después llegaron nuevas platas; Isabella López y Moreno en pecho, Agudelo en combinados; y un oro gigante de Johan Molina en los 400 libre (4:17.12), completando junto a Díaz un 1-2 que celebró todo el equipo. Los relevos masculinos cerraron con plata en el 4×100 libre.
Por la tarde, en la Maglione, Colombia volvió a imponerse. Tomás Escobar fue oro en los 200 espalda (2:10.77), Ramírez plata, y en fondo, Erika Naranjo dominó los 1500 libre con autoridad. Más podios llegaron con Muñoz en el 100 mariposa (oro), Isabella Moreno en pecho (plata) y Johan Molina en 400 libre (oro).
Sábado: la coronación

La última mañana de la Copa Pacífico no tuvo freno. María Agudelo (2:16.40) y Carolina Rojas (2:11.07) sumaron dos oros más en los 200 libre. Reyes y Díaz aportaron dos bronces en los 100 libre masculinos; Isabela León sumó otro más en los 200 mariposa; y Samuel Mazo fue oro en los 200 pecho.
Matías Ramírez fue plata en los 800 libre, mientras que en el 100 espalda femenino llegó otro 1-2 dorado: oro para María Gabriela Becerra (1:07.76) y plata para Isabella Martínez. La última gran explosión vino con el relevo masculino 4×100 combinado (16-18 años): oro y dominio absoluto (3:58.97).
Un torneo con dos almas y un solo campeón

La estructura del evento lo exige todo: mañana de finales contrarreloj por puntos (Copa Pacífico), tarde de finales absolutas por medallas (Copa Maglione). Y Colombia, sin titubear, fue el mejor en ambas arenas.
Copa Pacífico – Clasificación General
1º Colombia – 568 puntos
2º Argentina – 542 puntos
3º Perú – 373.5 puntos
Colombia cerró la Pacífico con 55 medallas:
25 oros – 21 platas – 9 bronces
Copa Julio Maglione – Medallero Final
1º Colombia – Campeón
2° Argentina
3° Brasil
39 medallas totales:
19 oros – 12 platas – 8 bronces
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La jornada final todavía dejó espacio para más gloria en la Maglione: oros de Carolina Rojas en los 50 y 200 libre, plata de Daniel Díaz en los 100 libre, bronce para Samuel Mazo en pecho, bronce para Isabella León en combinados, oro en los 800 libre masculinos, un oro más de Rojas en los 100 espalda y un bronce de Becerra, y un cierre dorado en el relevo combinado mixto (4:14.99).
La deportista más destacada del doble campeonato fue María Gabriela Becerra, con 622 puntos, una cifra que resume regularidad, velocidad y un temple de finalista absoluta.
Una generación que ya pide pista internacional

Colombia se fue de Cochabamba como campeón de todo: de la mañana, de la tarde, de los puntos y del medallero. Pero más allá de los números, hubo algo más profundo: la sensación de una camada lista para pelear lo grande.
El agua boliviana vio relevos perfectos, carreras tácticas, emotivas definiciones y un equipo que nunca dejó de sumar. La Copa Pacífico y la Julio Maglione se tiñeron de amarillo, azul y rojo… y el himno colombiano, como hacía años no pasaba, sonó una y otra vez hasta convertirse en la banda sonora de un torneo inolvidable.
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