Durante el desarrollo del Gran Premio de Baréin en Catar, correspondiente a la Fórmula 2, Sebastián Montoya vivió un fin de semana complicado, justo en los días en que celebraba su cumpleaños número 20. Ni la clasificación ni las competencias de velocidad jugaron a su favor, y el joven piloto colombiano terminó sumando kilómetros de aprendizaje más que resultados.
En la clasificación del viernes, Montoya no logró una vuelta rápida que lo dejara bien ubicado en la parrilla y terminó en el puesto 18. El sábado, en la carrera sprint, un toque con el irlandés Alexander Dunne en la séptima curva del Circuito Internacional de Sakhir lo obligó a abandonar en la primera vuelta. Su auto hizo un trompo y quedó detenido en sentido contrario a la pista, generando la aparición del safety car. El colombiano no pudo reanudar la marcha, y ese fue el triste cierre del día.
Pese a todo, Montoya estuvo rodeado de su familia en Bahréin, incluido su padre, el ex piloto de Fórmula 1 Juan Pablo Montoya, quien lo acompaña de cerca en este proceso. Antes de la clasificación, el bogotano habló con AS Colombia sobre el presente de su hijo: “Todo lo que está haciendo Sebastián hay que pagarlo. El equipo te da el carro, los mecánicos, el servicio, pero tú pones los patrocinadores”, explicó. “Este año hemos mejorado, conseguimos varios apoyos, aunque todavía falta. Aún no llegamos ni a cubrir la mitad del presupuesto”.
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El domingo, Sebastián intentó redimirse en la carrera principal. Salió desde la posición 18, esta vez con neumáticos blandos, y en las dos primeras vueltas ya había ganado dos posiciones, una de ellas frente a su compañero en Prema Racing, el italiano Gabriel Minì. Su ritmo fue sólido en los primeros giros, incluso superando a Arvid Lindblad en la vuelta 7.
Montoya fue de los primeros en entrar a boxes para cambiar a neumáticos duros, cayendo al puesto 20. Con esta estrategia, aprovechó las paradas del resto para ubicarse 13º en la vuelta 18. Sin embargo, una sanción de cinco segundos por exceder el límite de velocidad en el pit lane arruinó parte del plan.
En las vueltas siguientes, protagonizó una intensa lucha con el mexicano Rafael Villagómez por la posición 13. El duelo entre ambos permitió que Lindblad, con mejor ritmo, los superara a ambos. A falta de ocho vueltas, Montoya cayó al puesto 15, y en las últimas tres giros, con sus neumáticos ya muy desgastados, fue perdiendo terreno hasta cruzar la meta en la posición 19. La sanción lo relegó aún más, al puesto 22.
Mientras su compañero Minì terminó noveno, el ganador del día fue Alexander Dunne, seguido por Luke Browning y Leonardo Fornaroli.
Así, el fin de semana de cumpleaños de Sebastián Montoya terminó siendo más un recordatorio del rigor de la Fórmula 2 que una celebración. Su primer accidente en la categoría y las consecuencias de una estrategia agresiva le dejaron enseñanzas valiosas en su temporada debut. El colombiano sigue sumando experiencia, sabiendo que en este deporte, cada vuelta cuenta más que cada festejo.
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