201 kilómetros entre Utiel y Oliva se recorrieron en la séptima etapa la Vuelta a España. Una jornada completamente llana para los velocistas.
El grupo rodo con tranquilidad y sin problemas, controlando la fuga de dos corredores, José Herrada y Ander Okamika.
A 34 km el pelotón capturó a Okamika, único sobreviviente de la fuga, y se dispuso a luchar por el sprint intermedio.
A un poco más de 10km y 5km dos caídas acabaron con la calma que se había vivido en la jornada, con Juan Sebastián Molano y los principales esprinters a salvo.
Un final masivo, con 12 corredores, dejó al francés Geoffrey Soupe como ganador, seguido del venezolano Orluis Aular y del belga Edward Theuns. Molano cruzó la meta en el cuarto lugar.
La clasificación general no sufrió cambios, con el juvenil Lenny Martínez como líder y Einer Rubio como el mejor colombiano.
Mañana, la octava jornada contará con 5 premios de montaña, lo que propicia una jornada con ataques y emociones en los 165 km entre Dénia y Xorret de Catí.
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